Construido en el siglo XIV. Es un inmenso castillo cuyos altos muros y torres nunca fueron conquistados por las armas. Es propiedad del Ministerio de Agricultura y fue silo de cereales, actualmente no se utiliza.
Castillo de planta trapezoidal. Pudo ser obra de Alfonso de Meneses, debido a su torre pentagonal que nos recuerda a fortificaciones como las de Ayllón y San Felices. Muros de 4 metros de grosor y casi 20 de altura. Encima de la entrada ojival se encuentran los blasones de los Alburquerque. La torre pentagonal tiene su acceso, a la altura del patio de armas, bajo un arco apuntado decorado con motivos florales góticos. El castillo, al igual que la localidad, aparece vinculado a la vida del poeta vallisoletano Nicolás Guillén. Sirvió de refugio a los Comuneros durante la guerra de las Comunidades.
